Los conservacionistas de una importante reserva natural dedicada a la cría e investigación de osos panda en la provincia suroccidental china de Sicuani, están estableciendo estaciones de supervisión en medio de la selva, para observar de forma más cercana a estos animales en vía de extinción.
Tres estaciones de monitoreo serán ubicadas en Ya'an, una zona de 5.300 kilómetros cuadrados donde el misionero y naturalista francés Pere Armand David vio a un panda gigante en 1869, la primera vez que Occidente tuvo noticias de este tipo de animales.
"Instalarnos en medio de la naturaleza salvaje nos permitirá ayudar a los animales inmediatamente en caso de situaciones de emergencia, como por ejemplo cuando estén heridos", comentó Li Lu, funcionario de la Oficina de Patrimonio Mundial de Ya'an.
"Nuestro propósito es supervisar la calidad del aire, los cambios geológicos, y las cadenas ecológicas del hábitat, así como proteger mejor a los pandas y a otros animales, como los pandas rojos (o pandas menores), y los monos langur", agregó Li.
El proyecto, que forma parte de un programa de cooperación con la UNESCO, mejorará la capacidad para ubicar y proteger a estas particulares especies.
Unos 50 expertos conservacionistas han recibido capacitación y se instalarán en las estaciones a finales de este a?o, a?adió.
El hábitat natural de Ya'an, hogar de unos 300 pandas salvajes, representa un 52% de las zonas de hábitats naturales de este tipo de osos en Sichuan.
El panda gigante es una de las especies más amenazadas del mundo. Los científicos estiman que un total de 1.590 pandas viven en libertad, la mayoría de los cuales se encuentran en las monta?as del suroeste de China.
Para finales del 2006, había cerca de 210 pandas en el país asiático.