El Dalai Lama dio el jueves una conferencia de prensa en Narita, Japón, en su camino hacia Estados Unidos, en otra muestra más de sus mentiras.
Durante la conferencia, el Dalai dijo que no es "antichino". Si eso fuera verdad, cómo es que ha instigado junto con sus asociados el separatismo durante casi 50 a?os, alentado un comportamiento violento entre algunos separatistas tibetanos en Lhasa, permitiendo que atacaran embajadas chinas e incendiaran y pisotearan la bandera nacional china?
La afirmación del Dalai de que no es "antichino" encierra tanto verdad como mentira. La realidad es que él mismo es un separatista tibetano, lo que ha estado haciendo en las décadas pasadas es alterar la ley y el orden de China, poner en peligro a organizaciones chinas en ultramar y humillar el emblema de un país digno.
El Dalai Lama dijo en la conferencia de prensa que ha apoyado a la Olimpiada de Beijing "desde el principio". Pero los hechos reales son que los separatistas tibetanos, instigados por el Dalai Lama, trataron de sabotear la Olimpiada de Beijing y de interrumpir el relevo de la antorcha olímpica por el mundo y de montar una farsa política aprovechando los Juegos Olímpicos.
De Londres y París a San Francisco a lo largo de la ruta del relevo de la antorcha olímpica hubo separatistas tibetanos que trataron de atacar a los portadores de la antorcha e incluso apoderarse de ella. Fueron los ataques violentos y el intento de arrebatar la antorcha los medios a los que recurrió para apoyar la Olimpiada de Beijing?".
El Dalai Lama dijo que los manifestantes tienen derecho a sus propias opiniones. Pero el hecho es que los separatistas tibetanos trataron en repetidas ocasiones de interrumpir violentamente el relevo de la antorcha olímpica. En París, se abalanzaron sobre Jin Jing, una atleta china discapacitada, para tratar de arrebatarle la antorcha.
El presidente del Comité Olímpico Internacional, Jacques Rogge, dijo previamente que los asaltos y ataques contra una atleta discapacitada son inaceptables. Las protestas violentas en Londres y París han despojado de un sue?o a los atletas y a los ciudadanos locales. Ese despojo no sólo ha puesto en peligro el sistema legal y orden social de una nación sino que también ha usurpado los derechos humanos de otras personas. Este tipo de "libertad" está destinado a la condena y desprecio de los amantes de la Olimpiada en todo el mundo.
En Tokio, el Dalai Lama dijo falsamente que el gobierno chino está tratando de desprestigiarlo. Sin embargo, la verdad es justamente lo contrario. Es el Dalai Lama quien ha estado desprestigiando la imagen de China a través de repetidas mentiras y de actividades violentas.
Una mentira repetida mil veces se vuelve verdad. Al ofrecer ponencias por todo el mundo, el Dalai Lama en realidad ha enga?ado al Occidente sobre sus ambiciones políticas de separar al Tíbet de China. Lo que ha hecho sólo pondrá en evidencia su verdadera naturaleza ante su audiencia y el mundo. Fin