En un artículo dado a conocer hoy por el importante Diario Guangming de China se citó a varios expertos chinos, quienes se?alaron que el sistema de siervos feudales del antiguo Tíbet era más cruel que el existente en Europa Occidental en la Edad Media.
La servidumbre en el antiguo Tíbet era mucho más oscura y más feroz que el sistema de servidumbre existente en Europa Occidental durante la Edad Media, dijo Zhang Yun, investigador del Centro de Investigación de Tibetología de China (CITC).
Zhang dijo al diario que antes de 1959, el Tíbet había sido durante mucho tiempo una sociedad de siervos feudales que integraba la religión y la política en la que los monjes y los nombres ejercían una dictadura.
Los siervos constituían más del 90 por ciento de la población del antiguo Tíbet, pero no tenían tierras, libertad o democracia.
Pero los propietarios de siervos, normalmente funcionarios, nobles o monjes importantes, eran los due?os de todas las tierras y de la mayor parte del ganado y explotaban a los siervos por medio de la usura, dijo Dainzin Lhunzhub, investigador del área social y económica del CITC.
Vendían, hipotecaban e intercambiaban siervos como cualquier otro tipo de propiedad e incluso imponían métodos de castigo brutales como cortar manos, pies u orejas, dijo Zhang.
Sólo liberándose de estos grilletes y obteniendo su libertad, las personas lograron recuperar la fuerza de la iniciativa y la creatividad, dijo Meng Guanglin, profesor de la Universidad Renmin de China.
Además del dominio económico, las autoridades del antiguo Tíbet pusieron grilletes al pensamiento y el comportamiento del pueblo y gobernaron su vida por medio del poder administrativo, enfatizó Zhang.
La servidumbre feudal del antiguo Tíbet era contraria a la tendencia de desarrollo de la historia y fue la raíz de la pobreza y el subdesarrollo de Tíbet, dijo Dainzin Lhunzhub.
Zhang se?aló que el Dalai Lama ha estado diciendo diferentes tipos de mentiras con el fin de ocultar el propósito real de la búsqueda de la independencia tibetana y de restablecer el sistema de servidumbre feudal que integra religión y política.
Tíbet no volverá nunca a las épocas oscuras y cualquier intento por lograrlo está condenado al fracaso, declaró el diario.