China aplica con firmeza una política exterior independiente y de paz, respeta el derecho de los demás pueblos a elegir soberanamente su vía de desarrollo, defiende la equidad y la justicia internacionales, y se opone a que un país imponga su voluntad a otro, intervenga en sus asuntos internos y abuse de su condición de poderoso para atropellar a los débiles. China de ninguna manera se desarrollará a costa de los intereses de otros países, pero tampoco renunciará a sus derechos e intereses legítimos, por lo que nadie debe ilusionarse con la posibilidad de que China trague el amargo fruto del menoscabo de sus intereses. Nuestro país aplica una política de defensa nacional de carácter defensivo. Su desarrollo no supone amenaza alguna para ningún país. Y China jamás aspirará a la hegemonía ni practicará la expansión, sea cual sea su grado de desarrollo.
China desarrollará con dinamismo las relaciones de la asociación global, ampliará los puntos en los que sus intereses convergen con los de los demás países, impulsará su coordinación y cooperación con otros grandes países, estructurará un marco de relaciones entre losgrandes paísescaracterizado por la estabilidad general y el desarrollo equilibrado, profundizará sus relaciones con los países vecinos persistiendo en los conceptos de amistad, sinceridad, beneficio mutuo e inclusión, y en su directriz diplomática respecto a dichos países, consistente en tratar con buena fe a los vecinos y tenerlos como socios, y afianzará su unidad y cooperación con los demás países en vías de desarrollo ateniéndose a la concepción correcta de la justicia y de los intereses, y a los conceptos de sinceridad, honestidad, afinidad y franqueza. China reforzará sus intercambios y su cooperación con los partidos y las organizaciones políticas de los diversos países, e impulsarálos contactos con el exterior por parte de las asambleas populares, los comités de los distintos niveles de la CCPPCh, el Ejército, los organismos territoriales, las organizaciones populares, etc.
China siempre persiste en la apertura al exterior como política estatal básica, persevera en llevar adelante su construcción con las puertas abiertas, promueve activamente la cooperación internacional en la construcción de la Franja y la Ruta, y se esfuerza por hacer realidad la coordinación de las políticas, la conexión de las infraestructuras, la fluidificación del comercio, la integración financiera y la comprensión mutua entre los pueblos, con el fin de crear nuevas plataformas de cooperación internacional e inyectar nuevas fuerzas motrices al desarrollo conjunto. China intensificará su ayuda a los países en vías de desarrollo, sobre todo a los menos desarrollados, y promoverá la disminución de la disparidad entre el desarrollo del Sur y el del Norte. Asimismo, apoyará el régimen del comercio multilateral, impulsará la construcción de zonas de libre comercio e impelerá la construcción de una economía mundial abierta.
China aboga por una concepción de la gobernanza global caracterizada por la deliberación en común, la construcción conjunta y el codisfrute; preconiza la democratización de las relaciones internacionales; persevera en la igualdad de todos los países, sean grandes o peque?os, fuertes o débiles, ricos o pobres; respalda a la ONU en su desempe?o de un papel activo; y apoya la ampliación de la representación de los países en vías de desarrollo, así como su derecho a opinar sobre asuntos internacionales. China seguirá desplegando su papel de gran país responsable y participará con dinamismo en la reforma y la construcción del sistema de la gobernanza global, aportando incesantemente su propia sabiduría y fuerza.
Camaradas: el destino del mundo está en manos de cada uno de los pueblos de los diversos países y el porvenir de la humanidad depende de lo que elijan ellos. El pueblo chino está dispuesto a propulsar, junto con el pueblo de los demás países, la construcción de una comunidad de destino de la humanidad, para crear entre todos un hermoso futuro para ella.
XIII. Firmeza e invariabilidad en el disciplinamiento integral y riguroso del Partido para elevar constantemente su capacidad de gobernar y su nivel directivo
Dado que el socialismo con peculiaridades chinas ha entrado en una nueva época, nuestro Partido debe mostrar una nueva fisonomía y acometer nuevas empresas. Quien forja el hierro ha de estar bien forjado. Ya que alPartido le incumbeunir y conducir al pueblo para llevar adelante la gran lucha, propulsar la gran causa y materializar el gran sue?o, no debemos vacilar en absoluto en mantener y perfeccionar su dirección, y en hacer de él un partido aún más firme y fuerte.
Estamos y estaremos siempre en el camino del disciplinamiento integral y riguroso del Partido. La simpatía o la aversión de la gente es lo que determina cuál será el porvenir y el destino de un partido o un régimen político. Debemos evitar y rectificar decididamente todo lo que las masas populares rechacen y aborrezcan. Todos los militantes del Partido debemos ser plenamente conscientes de que el entorno de la gobernación con el que se enfrenta nuestro Partido es complejo, como también lo son los factores que afectan a su carácter avanzado y debilitan su pureza, y todavía no se han solucionado de raíz los destacados problemas existentes en su seno, como la impureza ideológica, organizativa y del modo de actuar. Debemos conocer a fondo la naturaleza prolongada y compleja de las pruebas que la gobernación, la reforma y la apertura, la economía de mercado y el entorno exterior plantean al Partido, conocer a fondo la intensidad y la gravedad de los peligros ocasionados por la relajación del ánimo, la falta de capacidad, la desvinculación de las masas, la corrupción y demás fenómenos negativos que arrostra el Partido, tomar consistentemente la resolución de los problemas como rumbo orientador y mantener la firmeza estratégica, para impulsar el avance en profundidad de su disciplinamiento integral y riguroso.
He aquí la exigencia general para la construcción del Partido en la nueva época: mantener y fortalecer su dirección integral; persistir en que vele por su propia administración y se discipline de modo integral y riguroso; y, tomando el fortalecimiento de la construcción tanto de su capacidad de gobernar durante largo tiempo como de su carácter avanzado y su pureza como línea principal, su construcción política como un mandato, el afianzamiento de los ideales, las convicciones y los propósitos como cimientos, y la movilización del entusiasmo, la iniciativa y la creatividad de todo el Partido como punto de acometimiento, llevar adelante integralmente su construcción política, ideológica, organizativa, disciplinaria y la de su estilo plasmando en todo este proceso la construcción institucional, impulsar a fondo la lucha contra la corrupción y mejorar constantemente la calidad de la construcción del Partido, con vistas a hacer de él un partido marxista gobernante rebosante de pujanza que marche en todo momento al frente de los tiempos, cuente con el sincero apoyo del pueblo, tenga la valentía de llevar a cabo una revolución interna y sea capaz de superar las pruebas planteadas por todo tipo de dificultades y peligros. (Continúa)