“Para hablar del significado de la calle antigua Gulou en Beijing, hay que mencionar primero los cambios que ha habido en la ciudad”, dice el periodista Wang Jun de la Agencia de Noticias Xinhua, experto en la investigación de la antigua Beijing.
Wang Jun se?aló el mapa de Beijing diciendo que “l(fā)a zona de Guang′anmen fue el centro de la capital de la dinastía Jin, aunque dejó de serlo más tarde durante la dinastía Yuan. Según las investigaciones que el profesor Zhao Zhengzhi de la Universidad de Tsinghua realizó durante la década de 1950, la mayoría de las calles al norte de la avenida Chang′an datan de la dinastía Yuan. En el a?o 1962, el profesor falleció, su alumna Xu Pingfang siguió la investigación, logrando dibujar un mapa aproximado de la capital de la dinastía Yuan. Por eso, cuando a comienzos de julio, Xu, que en aquel momento era presidenta de la Asociación de Arqueología de China, se enteró de la noticia de la destrucción de la calle antigua Gulou, comentaba muy preocupada que esa es una calle antigua de la capital de la dinastía Yuan, y no se puede destruir.
Según los estudios del profesor Zhao, la calle antigua Gulou tiene una historia de más de 700 a?os. Wang Jun considera que durante la dinastía Yuan, esta calle fue una vía importante que conectaba la ciudad imperial en el sur y el mercado en el norte, mientras que Shichahai y Jishuitan fueron zonas de actividades públicas. La construcción del canal Tonghui convirtió al barrio de Zhonggulou en un importante centro del comercio de la ciudad. Durante la dinastía Ming, el eje central se trasladó al este, mientras que la capital se movió hacia el sur. Las vías de agua del canal Tonghui fueron incluidas en el barrio imperial, lo que transformó Zhonggulou en una zona de residencia y la avenida antigua Gulou en una calle tranquila.
De acuerdo con Wang Jun, la calle Jiugulou Dajie nunca se ha cambiado ni en su enchura ni en la altura en los 700 a?os transcurridos. Dice que las medidas de la calle conservan la memoria de la ciudad. Cuando se destruyan esta medidas, se pierde para siempre su memoria. El famoso escritor Liu Xinwu es también de la misma opinión, ya que cree que la importancia de la calle Jiugulou Dajie radica en su perfecta conservación de la anchura de la calle, el espacio y altura de las casas antiguas, así como los antiguos ladrillos.
Beijing fue la primera ciudad del mundo en construirse conforme al sistema de calles. Según Wang Jun, en aquella época los beijingneses vivieron en siheyuan, con los cuales se formaron los hutong (callejones). Al salir del hutong se accedía a las calles principales, donde se podían comprar los artículos cotidianos. Además, casi en cada avenida grande había un templo. A lado de la calle antigua Guluo se encontraban el Templo Shuangsi y el Templo Nianhua, lugares de gran actividad pública. El siheyuan, el hutong, la calle y el templo formaron una comunidad bien organizada. Las funciones de la ciudad estaban perfectamente distribuidas entre los barrios, ofreciendo zonas exclusivas para la residencia, para el comercio y para el trabajo.
El cantante He Yong, que vivió en el hutong Xiaoshiqiao al lado de la calle antigua Gulou, es de la misma opinión. Cuando era peque?o, veía frecuentemente que los viejos charlando y tomando el sol tranquilamente en el hutong. Allí se encontró incluso con el último eunuco de China. Cuando tenía unos diez a?os, jugaba con frecuencia con sus amigos en el hutong. Sin embargo, e la actualidad casi todos se han trasladado a otras zonas, lo que hace muy difícil volver a reunirse. He dice que lo que echa mucho de menos es la escena de todos reunidos para comer la olla mongola, y dice que “sólo se puede comer en el hutong, donde se puede sentir su sabor verdadero”.
La fisonomía del Beijing del pasado era “l(fā)a mitad de muro del palacio imperial y la mitad de árboles”. Wang Jun nos muestra una foto de la década de 1960 donde se puede observar que la ciudad Beijing estaba cubierta de un mar de árboles, al igual que el interior de los siheyuan, mientras que otra foto del mismo lugar en la década de los 90 sólo muestra edificios altos. El periodista dice que también que “l(fā)os hombres de la antigüedad eran muy inteligentes y combinaban perfectamente las construcciones con las condiciones geográficas y climáticas”.
Lamentablemente estos patios y calles son cada mes menos, ya que han sido sustituidos por calles anchas de 30 o 50 metros en las que uno ni siquiera puede protegerse a la sombra de un árbol.
Sobre el plan de ampliar la anchura de la calle antigua Gulou a 30 metros, Wang Jun lo considera un error. Dice que si la ampliara a 30 metros, sería una carretera, no una calle. Las calles sirven para los peatones, para que paseen libremente de un lado al otro, pero las carreteras sirven para los vehículos. ?Saben por qué las tiendas en la avenida Ping′an no tienen buenas ventas? Porque esa calle no está adaptada para que la gente pueda pasear y comprar, sino que los peatones se sienten cansados y ahogados.
Wang Jun está muy preocupado por las posibles consecuencias de la ampliación de la anchura de la calle vieja de Gulou, ya que cree que con esta obra, una gran cantidad de vehículos entrarán en la calle, lo que destruirá radicalmente la vida tranquila de los habitantes de la zona, así como el ambiente cultural y elegante de Shichahai. Lo más horrible es que para compensar el fondo asignado a la obra, los promotores construirán sin duda muchos edificios para absorber la inversión, lo que podría intensificar la centralización de las funciones de la ciudad, provocar atascos y deteriorar el barrio antiguo. “Para aquel entonces, Beijing quedará completamente deteriorada”, manifestó Wang Jun.