Antes de llegar al lugar, Li sabía que la aldea era muy pobre, pero no que las condiciones naturales fueran tan duras. Cuando vio a los aldeanos vestidos con harapos y descalzos, y a los ni?os desnudos, decidió quedarse. Su decisión fue aún mayor cuando un residente local le dijo que ninguno de los 400 aldeanos podía leer o escribir.
Un a?o más tarde, convenció a su esposa Lu para que trabajara con él en la escuela primaria. La pareja subía por una escalera de madera destartalada, de 40 metros de largo, cada día para llegar a la escuela y ense?ar a sus alumnos.
En 1996 se graduó el primer grupo de la escuela, alcanzando resultados académicos mucho más sobresalientes que otras escuelas similares del distrito. Li fue elegido como maestro sobresaliente y la escuela premiada con el estatus de grupo avanzado por parte del gobierno local.
Un total de 254 estudiantes se han graduado en la escuela durante estos 21 a?os, y muchos de ellos han abandonado las monta?as para trabajar en otros lugares.
La escalera de madera ha sido reemplazada por una de hierro muy estable con barrera protectora de concreto, haciendo mucho más seguro el camino de ida y vuelta de la escuela para los alumnos.
Una nueva escuela aguardará muy pronto por los estudiantes en la cima de la monta?a, gracias a la donación de un millón de yuanes recibida por los esfuerzos realizados por el gobierno local y el propio Li.
"La carretera rural hacia la aldea ya está en construcción y se terminará muy pronto”, expresó Li. “Espero que la aldea Erping sea un lugar diferente en los próximos 20 a?os y mis estudiantes puedan estudiar y trabajar duro para construir un pueblo mucho mejor”.