En ese entonces, He cursaba su ultimo a?o de la escuela primaria, a una hora de camino desde la casa. Ella se iba durante la semana a la escuela y regresaba los fines de semana.
Como su hermana era tan joven para ser de gran ayuda, hasta su tío se negaba a acogerla por las noches, por lo que debía dejar a su hermanita sola en casa por las noches mientras ella estaba en la escuela.
Preparaba con antelación la comida de toda la semana, y su hermana se la comía fría o la calentaba un poco cuando tenía hambre, mientras que He se llevaba su ración para la escuela.
Las cosas fueron más fáciles al a?o siguiente cuando He comenzó la secundaria, y su hermana entró en la escuela primaria.
Por el día, su hermana tenía profesores que cuidaban de ella en la escuela y, por la noche, se quedaba en la casa de su tío pues ya había crecido lo suficiente como para brindar alguna ayuda.
Aunque llevó una vida muy sencilla en la secundaria, vistiendo ropa vieja que le dejaban familiares o amigos, decidió darse un gusto para los exámenes de ingreso a la universidad y se compró un par de mudas nuevas.
"Simplemente no quería lucir diferente", espetó.
La ropa nueva la hizo ver muy segura y además le dio muy buena suerte pues logró la calificación necesaria para entrar en la Universidad de Tecnología y Negocio de Chongqing.
Ahora, cuando es una estudiante de 23 a?os, He se ha convertido en una celebridad universitaria después de que su historia saliera a la luz pública.
El 18 de mayo, He fue el centro del auditorio universitario, donde fue reconocida como una de las “personalidades más conmovedoras” del a?o.
Su hermana cursa actualmente el primer a?o en una escuela secundaria del segundo ciclo cerca de su pueblo natal.
Mirando atrás a los últimos 12 a?os, He dice deberle mucho a su profesora de primaria Pu Yunwan, quien no solo la ayudó con su matrícula escolar, sino que la estimuló para que siguiera estudiando y no dejara la escuela.
"La profesora Pu fue mi salvadora, quien cambió mi vida e hizo que no me sintiera insegura, ni actuara de manera poco sociable”, reconoció.
Ella espera convertirse algún día en profesora, como Pu, quien siempre está dispuesta a ayudar a los alumnos necesitados.