Poco después del fin de los días más calurosos del verano, conocidos como “días de perro”, el sábado, un fuerte aguacero azotó varias zonas del norte de China.

El Centro Meteorológico Nacional emitió una alerta amarilla por precipitaciones y otra azul por tiempo convectivo severo a primera hora del lunes en múltiples zonas, incluidas la provincia de Hebei y los municipios de Beijing y Tianjin en el norte, las provincias de Hubei y Hunan en el centro, y las provincias de Anhui, Jiangxi y Zhejiang en el este, desde el lunes temprano hasta el martes por la ma?ana.

Fuertes tormentas barrieron la región de Beijing-Tianjin-Hebei, desde la noche del domingo. Los seguimientos muestran que Hebei fue la provincia más castigada por las lluvias a nivel nacional, con un máximo acumulado de 298,1 milímetros en 24 horas en el pueblo de Qicun, distrito de Quyang, informó la dependencia meteorológica.

En Beijing, los intensos aguaceros afectaron gravemente los desplazamientos diarios durante la hora punta del lunes.

Imágenes en Internet mostraron paraguas doblados por los fuertes vientos, mientras que las principales arterias del transporte quedaron paralizadas por la tempestad.

Según la Autoridad del Agua de la capital china, entre las 8 de la ma?ana del domingo y las 9 de la ma?ana del lunes, la precipitación media en la ciudad fue de 40,4 milímetros, con un pico de 138,9 milímetros en el parque Yongshun, en el distrito de Tongzhou, y 45,7 milímetros en la zona urbana.

Hasta el lunes temprano, el nivel promedio de los ríos en Beijing permanecía estable, sin casos de alerta. Los principales proyectos de conservación del agua funcionan sin problemas, con seguridad y normalidad.

Un total de 3156 personas en los distritos de Fangshan, Mentougou y Changping fueron reubicadas.

Las precipitaciones afectaron Tianjin desde el domingo por la ma?ana, con hasta 150 milímetros en ciertas áreas. La ciudad puso en marcha el domingo temprano una respuesta de emergencia para el control de inundaciones de nivel IV.

Los vídeos en la red revelaron vehículos circulando en carreteras anegadas como ríos. Los internautas bromearon diciendo que, tras la tormenta, Tianjin se había convertido en la “Venecia del Oriente”, siendo el barco el medio de transporte más fácil para surcar la ciudad.