Un grupo de la policía armada llegó a pie alrededor de las 00:35 a.m. del lunes al lago formado por el terremoto en Tangjiashan, provincia suroccidental china de Sichuan, y empezó a trabajar inmediatamente para evitar el peligro de una gran inundación.
Los policías son parte de los cerca de 1.800 oficiales de la policía armada y de los soldados del Ejército Popular de Liberación (EPL) que empezaron a avanzar a pie ayer hacia el creciente lago formado por el terremoto, que se encuentra a 3,2 kilómetros río arriba de la cabecera distrital de Beichuan, de la cual fueron evacuados miles de supervivientes desde el miércoles.
Cada uno de los soldados lleva consigo diez kilogramos de dinamita y planean hacer estallar la barrera formada por los aludes de tierra, dijo hoy a Xinhua un oficial del EPL.
La barrera está en peligro de venirse abajo porque el nivel del agua subió casi dos metros el sábado para llegar a 723 metros, apenas 29 metros abajo de la parte más baja de la barrera, que mide 752 metros de altura.
El peligro se intensificó porque se pronosticaron fuertes vientos y tormentas de lluvia en el área para el domingo y lunes. Además, la zona fue sacudida ayer por un fuerte temblor réplica de 6,4 grados en la escala de Richter.
El lago contiene más de 128 millones de metros cúbicos de agua y podría causar una devastadora inundación si la barrera se derrumba.
