Pingyao, en la provincia septentrional de Shanxi, era un lugar desconocido, pero el a?o 1997 represento un hito para este peque?o pueblo, ya que fue nombrado sitio del Patrimonio Mundial por la UNESCO.
Sus ventas de entradas ascendieron a 5 millones de yuanes (alrededor de 600.000 dólares) en 1998, comparados con los 180.000 yuanes (alrededor de 21.700 dólares) del a?o anterior.
En China el lugar más rico del Patrimonio Mundial es Lijiang, un antiguo pueblo en la provincia de Yunnan, al suroeste de China. En el 2000, recaudó 1.340 millones de yuanes (unos 161 millones de dólares) gracias al turismo y sectores relacionados.
Los eminentes resultados financieros registrados por estos sitios del Patrimonio Mundial son evidentes y han alentado a muchos otros a seguir el ejemplo.
La ciudad de Luoyang, en la provincia central de Henan, no destinaba mucho dinero a limpiar los alrededores de las bien conocidas Grutas Longmen. En 1998, la ciudad gastó 150 millones de yuanes (alrededor de 18 millones de dólares) para desmantelar 180.000 metros cuadrados de edificios y plantas y raíces de árboles alrededor de las grutas, para intentar entrar en la lista del Patrimonio Mundial.
Según un mandato de la UNESCO, un país no debe presentar más de una solicitud cada a?o. Si es así, la UNESCO no podrá entregar a China todas las solicitudes hasta el próximo siglo.
Algunos críticos dudan sobre los propósitos de los solicitantes al Patrimonio Mundial, temiendo que lo único que les importa sean las metas financieras. "No importan los motivos que tengan estas solicitudes, los resultados son buenos para la protección de estos sitios del Patrimonio Mundial", dijo el profesor Lu zhou de la Universidad de Qinhua, quien es vicepresidente de la asociación de China para la protección de reliquias.
Mientras tanto, el proceso de solicitud también es útil para que el pueblo reconozca la importancia de proteger las reliquias, anotó Lu.
Sea lo que fuere, el profesor Gao Ning de la Universidad de Beijing advirtió que sólo un peque?o número de solicitudes pueden triunfar. En este caso, los gobiernos locales deben tratar de aprender cómo encontrar un balance entre el desarrollo y la protección de las reliquias culturales.
(07/07/2004)