Estimados diputados: El 2002 es un a?o muy importante para el desarrollo pol?tico, econ?mico y social de nuestro pa?s, por lo que reviste un significado trascendental llevar a buen t?rmino el trabajo financiero y cumplir las tareas previstas en el presupuesto para este a?o. En la actualidad, nuestro pa?s goza de estabilidad pol?tica y prosperidad social y tiene un enorme potencial para el desarrollo econ?mico; todo esto ha generado condiciones favorables para su expansi?n econ?mica en el presente a?o. No obstante, debido a la complejidad de la situaci?n internacional y a la continua ralentizaci?n del crecimiento de la econom?a y el comercio mundiales, el desarrollo econ?mico de nuestro pa?s afronta nuevas dificultades y graves retos. La entrada de China en la Organizaci?n Mundial del Comercio (OMC) favorece, por lo general, nuestro desarrollo econ?mico y apertura al exterior; pero algunos sectores y empresas de poca competitividad podr?n ser objeto de ciertas sacudidas en un corto plazo. En vista de esta situaci?n, la direcci?n central ha decidido que en el 2002 debemos seguir persistiendo en el principio de expansi?n de la demanda interna y aplicando la pol?tica fiscal activa, ampliar en forma apropiada la magnitud de los gastos fiscales y esforzarnos para promover el desarrollo sostenido, r?pido y sano de la econom?a nacional.
A la luz de la situaci?n y las exigencias arriba mencionadas, la directriz de la programaci?n del presupuesto y del trabajo financiero para el 2002 se define de la siguiente manera: poner en pr?ctica a fondo el esp?ritu de las V y VI Sesiones Plenarias del XV Comit? Central del Partido Comunista de China y el de la Conferencia Central sobre el Trabajo Econ?mico del a?o pasado, y tomar la promoci?n del desarrollo sostenido, r?pido y sano de la econom?a nacional y el progreso integral de la sociedad como objetivo, la expansi?n y fomento de la demanda interna como tarea prioritaria, y la propulsi?n de la reforma fiscal y la intensificaci?n de la administraci?n presupuestaria como medios, para aplicar en forma concienzuda la pol?tica fiscal activa, efectuar una rigurosa recaudaci?n y administraci?n de los ingresos, garantizar el aumento estable de los ingresos fiscales, reajustar y optimizar la estructura de los gastos, asegurar la satisfacci?n de las necesidades de los gastos prioritarios, elevar los efectos de la utilizaci?n de los fondos fiscales y ofrecer una garant?a financiera para la aplicaci?n de los diversos principios y pol?ticas importantes de la direcci?n central.
De acuerdo con la referida directriz, el Consejo de Estado ha confeccionado el proyecto de presupuesto central para el 2002 en los siguientes t?rminos:
Para este a?o, se prev? que los ingresos de la hacienda central totalicen 1.064.600 millones de yuanes, lo que supone un aumento de 76.500 millones, o del 7,7% (para facilitar la comparaci?n, al calcular la tasa de crecimiento se ha hecho un reajuste del resultado del ejercicio del 2001 seg?n el proyecto de reforma, puesto en pr?ctica en el 2002, del reparto de los ingresos derivados de los impuestos sobre la renta, y lo mismo de aqu? en adelante). Esta suma incluye 1.004.200 millones de yuanes por concepto de ingresos propios de la hacienda central, lo que significa un incremento de 75.400 millones, o del 8,1%, en relaci?n con el a?o pasado. Los gastos de la hacienda central sumar?n 1.374.400 millones de yuanes, lo que representa un aumento de 126.500 millones, o del 10,1%, respecto al a?o anterior. Este monto comprende 641.200 millones de yuanes destinados a los gastos propios de la hacienda central, cifra que supone un incremento de 65.800 millones, o del 11,4%, en relaci?n con el a?o pasado. El balance de los ingresos y los gastos de la hacienda central arrojar? un d?ficit de 309.800 millones de yuanes, cantidad que supone un aumento de 50.000 millones respecto al a?o pasado. En el 2002, el principal de las deudas internas y externas que la hacienda central necesita amortizar a causa de su vencimiento ser? de 258.100 millones de yuanes, suma que, junto con los 309.800 millones destinados a cubrir el d?ficit de este a?o y los 25.000 millones en concepto de bonos emitidos por las autoridades centrales en nombre de los gobiernos locales, requiere una emisi?n de bonos p?blicos por un valor total de 592.900 millones de yuanes, entre los cuales 567.900 millones se contabilizar?n como ingresos de la hacienda central mediante el endeudamiento. Adem?s, para el 2002 se han presupuestado 86.000 millones de yuanes como ingresos del fondo gubernamental central y 86.000 millones en concepto de gastos del mismo.
Los ingresos presupuestarios de las haciendas locales para el a?o 2002, confeccionados por la hacienda central, totalizar?n 1.530.500 millones de yuanes, lo que representa un aumento de 149.700 millones, o del 10,8%, respecto al resultado del ejercicio anterior. Esta suma incluye los 797.300 millones de yuanes de los ingresos propios de las haciendas locales, o sea, 89.000 millones o un 12,6% m?s que el resultado del a?o anterior; y los 733.200 millones de yuanes de los ingresos procedentes de los subsidios de la hacienda central, es decir, 60.600 millones o un 9% m?s con relaci?n al a?o precedente. Los gastos presupuestarios de las haciendas locales sumar?n 1.530.500 millones de yuanes, lo que supone un incremento de 162.200 millones, o del 11,9% , frente al resultado del ?ltimo ejercicio. Este monto comprende los 1.470.100 millones de yuanes de los gastos propios de las haciendas locales, esto es, 161.100 millones o un 12,3% m?s que el resultado del a?o anterior; y los 60.400 millones de yuanes de los gastos destinados a la hacienda central, cifra que significa un incremento de 1.100 millones respecto al a?o pasado. Se registrar?, en consecuencia, un equilibrio entre los ingresos y los gastos de las haciendas locales.
Integrando el presupuesto central y los presupuestos locales para el 2002, se prev? que los ingresos fiscales de todo el pa?s asciendan a 1.801.500 millones de yuanes, es decir, un aumento de 164.400 millones, o del 10%, respecto al resultado del ejercicio anterior; y que los gastos fiscales de todo el pa?s alcancen los 2.111.300 millones de yuanes, o sea, 226.900 millones, o un 12% m?s que el resultado del a?o pasado.
Conforme a la disposici?n de la direcci?n central y a la exigencia planteada para el trabajo financiero por el desarrollo pol?tico, econ?mico y social de nuestro pa?s, la programaci?n del presupuesto central y el trabajo financiero en el 2002 se centrar?n en los siguientes aspectos:
1. Programar de manera segura los ingresos fiscales y garantizar el cumplimiento de las tareas presupuestarias.
En los ?ltimos a?os, debido a los m?ltiples factores especiales del incremento de ingresos, la hacienda central ha venido manteniendo un crecimiento relativamente elevado en sus ingresos. En el 2002, la econom?a nacional continuar? su desarrollo r?pido y sano, y con la aceleraci?n del reajuste estructural la rentabilidad econ?mica de las empresas se elevar? a?n m?s, todo lo cual permitir? sentar una s?lida base para el incremento de los ingresos fiscales en el presente a?o. Sin embargo, debe tomarse en cuenta que este a?o se reducir?n considerablemente los factores especiales del ascenso de los ingresos y, adem?s, se presentar?n ciertos factores de disminuci?n de los mismos. Por ejemplo: la rebaja sustancial de las tasas arancelarias y el cambio del m?todo de valoraci?n aduanera de los precios de las mercanc?as importadas en cumplimiento de los compromisos asumidos al ingresar en la OMC redundar?n en una posible reducci?n de los ingresos derivados de los impuestos sobre las importaciones; el recorte de las tasas del impuesto del timbre para las transacciones en valores dejar? sentir m?s este a?o su influencia sobre los ingresos tributarios al respecto; y en el a?o en curso continuar?n reduci?ndose en un punto porcentual las tasas de los impuestos sobre las transacciones de la banca y los seguros. Tomando en consideraci?n todos los factores antedichos, hemos planeado un aumento de los ingresos de la hacienda central correspondiente a grandes rasgos al crecimiento econ?mico para el a?o 2002.
En circunstancias en que los ingresos y los gastos est?n programados con estrechez y existe la posibilidad de que aparezcan nuevos factores conducentes a la disminuci?n de los ingresos y al aumento de los gastos en el curso de la ejecuci?n del presupuesto, es preciso dedicar enormes esfuerzos a intensificar la recaudaci?n y la administraci?n de los ingresos para garantizar un firme incremento de las entradas fiscales. Conforme a la exigencia del Consejo de Estado sobre la estabilizaci?n del sistema impositivo y el fortalecimiento de la recaudaci?n y la administraci?n tributarias, recaudaremos los impuestos con riguroso apego a la ley y reforzaremos la inspecci?n tributaria y asestaremos resueltos golpes a las actividades delictivas de evasi?n, fraude y rechazo en el pago de impuestos y a las de contrabando; de conformidad con lo estipulado para el ingreso en la OMC, revisaremos y reglamentaremos en mayor medida la pol?tica de trato preferencial en la recaudaci?n tributaria y rectificaremos efectivamente las pol?ticas de recaudaci?n de impuestos para su posterior devoluci?n elaboradas seg?n el libre albedr?o de algunas autoridades locales o departamentales, as? como las arbitrariedades en la exenci?n parcial o total de impuestos y en el aplazamiento de la cobranza, reglamentando as? el orden en la recaudaci?n tributaria.
2. Aplicar a conciencia la pol?tica fiscal activa y esforzarse por ampliar y fomentar la demanda interna.
En el a?o 2002 se seguir? aplicando la pol?tica fiscal activa. Con el prop?sito de intensificar la construcci?n de las infraestructuras e impulsar con ello el incremento de la inversi?n en activos fijos, se emitir?n, seg?n lo planeado, bonos p?blicos de largo plazo para la construcci?n por un valor de 150.000 millones de yuanes, de los cuales 125.000 millones se incluir?n en el presupuesto central y los 25.000 millones restantes ser?n emitidos en nombre de los gobiernos locales. Toda esta cantidad se utilizar? principalmente para los proyectos en ejecuci?n con fondos provenientes de la deuda p?blica, los proyectos de explotaci?n de las regiones occidentales, la transformaci?n t?cnica de las empresas clave, as? como el trasvase de las aguas del sur al norte, las obras de protecci?n de los recursos h?dricos de Beijing y Tianjin, las obras infraestructurales en el campo y las necesarias para la seguridad p?blica, fiscal?a, tribunales y otros ?rganos judiciales y para los centros docentes superiores con cupo adicional de admisi?n de nuevos estudiantes.
Los gobiernos de los distintos niveles y los departamentos correspondientes deben fortalecer a?n m?s la administraci?n y supervisi?n de la utilizaci?n de los fondos provenientes de la deuda p?blica, seleccionar con acierto los proyectos a emprender, aplicar con rigor el sistema de licitaci?n para la ejecuci?n de los proyectos acometidos con los mencionados fondos, ampliar el alcance de los pagos centralizados por la Hacienda respecto a los fondos provenientes de la deuda p?blica para la construcci?n, evitar resueltamente inversiones in?tiles y construcci?n repetida o anticipada, hacer esfuerzos por poner fin a los fen?menos de retenci?n, desplazamiento, utilizaci?n il?cita, p?rdida o despilfarro de tales fondos y elevar los efectos de su utilizaci?n. Al mismo tiempo, deben prestar atenci?n a combinar la aplicaci?n de la pol?tica fiscal activa con el reajuste de la estructura econ?mica, la profundizaci?n de la reforma del mecanismo, el aumento de las fuentes de empleo, la mejora de la vida del pueblo y el desarrollo econ?mico sostenible, poner en pleno juego el efecto integrado de las pol?ticas en relaci?n con la emisi?n de m?s t?tulos de deuda p?blica, la recaudaci?n tributaria, la distribuci?n de los ingresos y el otorgamiento de cr?ditos con intereses pagados por la Hacienda, y ampliar y fomentar la demanda interna a trav?s de m?ltiples canales.
3. Garantizar las necesidades de gastos de la seguridad social y del pago salarial y mantener la estabilidad de la sociedad.
Acelerar la formaci?n del sistema de seguridad social reviste gran significado para garantizar la subsistencia b?sica de los habitantes de bajos ingresos en las ciudades y poblados, para impulsar la reforma de las empresas estatales y para salvaguardar la estabilidad social. Las haciendas de los diferentes niveles invertir?n m?s en la seguridad social. La hacienda central designar? este a?o 86.000 millones de yuanes (un aumento del 28% respecto al a?o 2001, seg?n c?lculos sobre la base de los factores cotejables) como gastos para la seguridad social. Esta suma incluye, entre otros, 4.600 millones de yuanes como subsidios para la garant?a del nivel m?nimo de vida de los habitantes en las ciudades, aumentados sobre la base de los 2.300 millones del a?o pasado seg?n la decisi?n del Consejo de Estado de continuar incrementando en el 2002 los subsidios de la hacienda central en este concepto con el fin de resolver el problema de la garant?a de las condiciones de vida b?sicas de la poblaci?n urbana de bajos ingresos, y 51.200 millones de yuanes como subsidios para las pensiones de vejez del personal de las empresas y para los trabajadores desplazados de sus puestos en las empresas estatales, cantidad que la hacienda central continuar? contemplando en el 2002 en vista de los gastos adicionales por el aumento de las normas de pensi?n b?sica de los retirados y jubilados de las empresas y el n?mero de trabajadores desplazados de sus puestos. Al mismo tiempo, con miras a promover el reajuste de la estructura econ?mica y apoyar a las empresas estatales en caso de cierre o quiebra seg?n la ley, en el 2002 la hacienda central asignar? 11.000 millones de yuanes como subsidio al cierre y la quiebra empresariales y 9.600 millones como gastos para pensiones de invalidez y fallecimiento y para bienestar y socorro sociales. Las haciendas de los distintos niveles locales deben llevar a cabo concienzudamente la pol?tica de la direcci?n central y hacer grandes esfuerzos por aumentar en el presupuesto el porcentaje de los gastos para la seguridad social.
Asegurar el pago oportuno e ?ntegro de los salarios del personal de los organismos administrativos e instituciones p?blicas es una obligaci?n que deben cumplir los gobiernos y los departamentos de la Hacienda de todos los niveles. La direcci?n central exige seguir aumentando apropiadamente, en el a?o 2002, el salario base de dicho personal e incrementar en forma correspondiente las pensiones de los retirados y jubilados de los mencionados organismos e instituciones, para lo cual la hacienda central aumentar? los gastos especiales en 11.800 millones de yuanes, de los que 9.500 millones se destinar?n como subsidio a los gastos de las haciendas locales al respecto. Con el prop?sito de ayudar a las autoridades locales a superar las dificultades financieras de las entidades de base, la hacienda central acrecentar? la transferencia de pagos, elevar? el porcentaje de la transferencia de pagos de car?cter salarial y coordinar? activamente la distribuci?n de fondos para ayudar a las autoridades locales a resolver el problema del impago salarial en determinadas temporadas del a?o en entidades de base. En el 2002, los fondos disponibles de la hacienda central para la transferencia de pagos de car?cter salarial ascender?n a 118.000 millones de yuanes, fondos ?stos que deben centrarse en subsidiar a las autoridades distritales y cantonales. Las haciendas locales, por su parte, deben perfeccionar en mayor medida el r?gimen financiero, acentuar en especial la transferencia de pagos provincial a niveles inferiores y ayudar en forma efectiva a los distritos y cantones que atraviesan por dificultades a resolver el impago de salarios. Las haciendas a nivel de base deben programar racionalmente el presupuesto, dedicando los fondos fiscales, antes que todo, al pago de los salarios establecidos por el Estado. Es indispensable seguir perfeccionando el m?todo basado en el pago ?nico por parte de la Hacienda de los salarios de los funcionarios de los organismos estatales y en la sujeci?n de los salarios de los maestros de las escuelas primarias y secundarias rurales a la administraci?n ?nica de la hacienda distrital, e implantar progresivamente un mecanismo de garant?a del pago normal de los salarios. Es necesario acelerar el cambio de funci?n de las autoridades distritales y cantonales y reducir efectivamente los organismos y el personal, creando as? condiciones para superar de ra?z las dificultades de las haciendas distritales y cantonales.