Estimado se?or Berge Gunnarl:
?C?mo est? usted?
Soy un chino como tantos otros. Nac? en 1942 en Shanghai, China. Me traslad? a Budapest, Hungr?a, en 1990. Hace poco, me enter? por la prensa de que "Li Hongzhi y Falun Gong han sido considerados entre los candidatos al Premio Nobel de la Paz de 2001, y el Comit? del Premio Nobel de Noruega presentar? la lista de candidatos en la reuni?n que se celebrar? el 23 de febrero". Me siento sumamente sorprendido y perplejo. Alfredo Nobel fue un gran hombre. Hizo enormes contribuciones al desarrollo de la sociedad humana. Los fondos del Nobel, establecidos en 1900, sirven para premiar a los que hayan hecho excelentes contribuciones a la humanidad, mientras que el Premio Nobel de la Paz se otorga a los grandes defensores de la paz mundial. Me parece sumamente inadecuado poner a Li Hongzhi y su Falun Gong en la lista de los candidatos al Premio Nobel de la Paz de 2001, porque ?l y su culto no han contribuido en nada a la paz mundial. Al contrario, Li es fundador y cabecilla de Falun Gong. Ha inventado una doctrina her?tica sobre bases falsas, predicando la elevaci?n al cielo en busca de la "perfecci?n" y el "abandono de la vida y la muerte", para controlar espiritualmente a los fan?ticos de Falun Gong, lo cual ha provocado suicidios en los ?ltimos dias. Se ha ensa?ado en las vidas de los dem?s, causando numerosas tragedias familiares. El incidente de autoinmolaci?n por fuego de fan?ticos de Falun Gong ocurrido hace poco en la Plaza Tiananmen en Beijing ha sido resultado de las extravagantes supercher?as de Li Hongzhi. Autoinmolaci?n, pisoteo de los derechos humanos y alteraci?n del orden social constituyen las caracter?sticas m?s destacadas de la organizaci?n her?tica, que debe ser rechazada por cualquier gobierno y pueblo del mundo.
Estimado se?or, usted goza de respeto universal, virtud eminente y gran prestigio. Es inteligente y sensato. Les propongo a usted y a sus colegas que sean justos al examinar y revisar los candidatos, para defender la sagrada posici?n del Premio Nobel en el coraz?n de los pueblos del mundo y salvaguardar su pureza, y rechazar el absurdo nombramiento de Li Hongzhi, porque ello es contrario a las aspiraciones del se?or Nobel. Incluir al repudiado fundador de Falun Gong en la lista de los candidatos al Premio Nobel de la Paz profana la gloria del premio y es un enga?o para todos los pueblos que buscan la justicia y aman la paz.
A trav?s de la reforma y la apertura al exterior, llevadas a cabo en m?s de 20 a?os, se han producido enormes cambios en la sociedad china. Se trata de un pa?s que ya no es la vieja China y un pueblo que ya no es el viejo pueblo chino. Sobre todo desde que el se?or Jiang Zemin se hizo Presidente, los pasos de la reforma y la apertura se han acelerado con audacia y sagacidad cada vez mayores y ?mbitos cada vez m?s amplios. Por lo tanto, el poder?o general del pa?s se ha acrecentado en gran medida y la vida del pueblo ha mejorado notablemente. Est? perfeccion?ndose d?a a d?a el sistema legal, y el pueblo goza de libertad de expresi?n, de asociaci?n y de culto. Sin embargo, China todav?a es un pa?s pobre y atrasado. Cuenta con gran extensi?n territorial, numerosos grupos ?tnicos y una poblaci?n de mil 300 millones de habitantes, todo un r?cord en el mundo. El Gobierno chino a?n enfrenta muchos problemas y dificultades para alcanzar la meta de un nivel de vida modestamente acomodado para todo el pueblo. Queda mucho por hacer. El pueblo chino, laborioso, valiente y bondadoso, comprende perfectamente lo que tiene que hacer el gobierno. La China de hoy se encuentra en la ?poca m?s espl?ndida en la historia de la naci?n. Nos complacen enormemente los ?xitos del pa?s. El pueblo chino entiende que la premisa para el enriquecimiento del pa?s y la felicidad del pueblo es la paz y la unidad. El gobierno encabezado por Jiang Zemin tiene como prioridad la salvaguarda de la estabilidad y la unidad del Estado. Eliminar el her?tico culto Falun Gong es una acci?n ben?fica que corresponde a la voluntad del pueblo.
Estimado se?or, no comprendo por qu? algunas personas fingen no ver las buenas obras hechas por el Partido Comunista de China y el Gobierno chino para su pueblo, e incluso para todo el mundo, y s?lo prestan atenci?n a sus defectos y errores, los buscan con lupa e insisten en ellos. En cuanto al tema de la eliminaci?n del culto her?tico, si lo hacen los gobiernos de Estados Unidos, Jap?n, Suiza, Australia, o de otros pa?ses, se consideran magn?ficas acciones para mantener el orden social y salvaguardar la vida de los ciudadanos. Sin embargo, cuando toca al Gobierno chino tomar medidas para repudiar a Falun Gong, lo critican calific?ndolo de "violaci?n de los derechos humanos", mientras agasajan al fundador en el pa?s que alardea de la justicia y que ahora intenta laurearlo con el Premio Nobel de la Paz. ?Es esto justo? He vivido 12 a?os en Europa, y entiendo que debido a las diferencias hist?ricas, culturales y nacionales entre Oriente y Occidente, los modos de pensar y de vivir son diferentes y existe distancia en el conocimiento de una misma cosa. Pero si intensificamos los intercambios, la comunicaci?n y el entendimiento mutuo en vez de reprochar, poner trabas e incluso difamar, la diferencia y la distancia pueden ser disminuidas, incluso eliminadas. Con este objetivo, le invito sinceramente a visitar a China cuando usted as? lo desee. Quiero acompa?arle a ver el pa?s, entrevistarse con la gente sencilla del pueblo y conocer sus puntos de vista y opiniones sobre la China actual. Podr? ver a cualquier persona, hacer cuanta pregunta quiera, y de seguro obtendr? respuestas reales.
Estimado se?or, deseo que considere mi opini?n y espero respetuosamente su respuesta.
Atentamente,
Zhou Jin Rong
Budapest, 21 de febrero, 2001