La canciller alemana, Angela Merkel, y el presidente francés, Nicolas Sarkozy, llamaron este miércoles acciones concretas en el Grupo de los 20 (G20) y aquellos que no cumplan los compromisos del G20 deberán separarse del mismo.
Al hablar durante una conferencia de prensa conjunta tras su reunión un día antes de la cumbre, Sarkozy dijo que los préstamos bancarios deben ser rastreables, los fondos requieren ser registrados y revisados, y agregó que la intención de acordar nuevas regulaciones para el sector financiero "no es negociable".
Merkel pidió resultados concretos de esta cumbre. "No deseamos resultados que no tengan efecto en la práctica. Queremos aquellos resultados que sean verdaderamente un resultado y cambien el mundo", dijo.
Sarkozy, quien, según los medios de comunicación, ha amenazado con abandonar la cumbre, expresó también su agradecimiento al primer ministro británico, Gordon Brown, por preparar esta reunión.
Merkel indicó que Alemania y Francia hablarán "con voz propia" en la cumbre.
El presidente francés se manifestó inconforme la ma?ana del miércoles con los "proyectos sobre la mesa" del G20.
"Ante el actual estado de la situación, las propuestas no satisfacen a Francia o a Alemania. No existe un acuerdo asegurado. Sé por experiencia que necesitaremos luchar hasta el último minuto", afirmó Sarkozy a la radiodifusora Europe 1.
Antes de partir rumbo a la cumbre, Merkel dijo en Berlín que estaba preocupada de que no fuera posible un acuerdo firme en cuanto a una reforma financiera en la reunión.
"Viajo a Londres con una mezcla de confianza y preocupación", afirmó la alemana, agregando que estaba de acuerdo con la insistencia de Sarkozy de que no aceptarían ningún "falso compromiso".
"Lo que el mandatario de Francia tiene en su vista es que no debemos esquivar ni hacer compromisos débiles en la constitución del mercado financiero del futuro. Lo apoyo en eso", dijo Merkel.
Tanto Alemania como Francia, insisten en que, para revitalizar a la economía,no se necesitan más paquetes de estímulo sino que deben implementarse regulaciones bancarias mucho más estrictas para prevenir crisis financieras en el futuro, mientras que Reino Unido y Estados Unidos toman más medidas de estimulación. Fin