Abrió los ojos un segundo y volvió a cerrarlos. Aún en cama, Wo Niu estiró el brazo para alcanzar el despertador. Las agujas indicaban las siete, hora de levantarse. ?Pero cómo podía haber tanta oscuridad en el exterior?
Wo se vistió y se acercó a la ventana. Respiró el fuerte olor del polvo e inmediatamente fue consciente: una tormenta de arena debía haber golpeado de nuevo la ciudad. Wo se vio sorprendido cuando abandonó el edificio y pudo observar el suelo cubierto por una densa capa de polvo amarillo. Los coches aparcados la víspera, de diversos colores, parecían ahora el mismo, similares acumulaciones de loes.
Aquella ma?ana era 16 de abril de 2006. La Estación Meteorológica de Beijing informó posteriormente que la tormenta de arena, la octava del a?o, había sido la mayor de los últimos a?os. En torno a 336.000 toneladas de arena y polvo cayeron sobre la ciudad durante la noche.
Frustrada, la población cuestionó los "intensos" esfuerzos de protección ambiental que el gobierno afirma haber realizado en los últimos a?os. Algunas voces se preocupaban por la imposibilidad de celebrar en 2008 las "Olimpiadas Verdes".
Tratando de rebajar la tensión social, los expertos de la Administración Estatal de Silvicultura han recordado que las condiciones climáticas varían cada a?o. La histórica tormenta de arena no indica necesariamente un empeoramiento de la situación ambiental. La reforestación ha comenzado a dar frutos. Además, los registros históricos muestran que las tormentas de arena son poco usuales en la capital china durante los meses de agosto y septiembre.
En Moscú, el 13 de julio de 2001, Beijing fue elegida por el Comité Olímpico Internacional sede de la 29a edición de los Juegos Olímpicos. La candidatura china establecía el compromiso de celebrar un evento "verde" que contribuyera a la protección del medio ambiente. El objetivo es realmente ambicioso, pero Beijing parece determinada a mantener su palabra.
De regreso desde Moscú, las autoridades de Beijing revisaron de inmediato los planes de desarrollo y protección ambiental de la capital china. La ciudad se comprometió a lograr los objetivos, establecidos con anterioridad para 2010, con tres a?os de antelación.
De acuerdo con el Comité Organizador de los Juegos Olímpicos de Beijing (BOCOG, según siglas en inglés), en los últimos a?os se han logrado importantes avances y algunos de los "objetivos verdes " ya han sido conseguidos.
En 2005 Beijing destinó 17.900 millones de yuanes (2.200 millones de dólares USA) a la protección ambiental. Los trabajos de reubicación comenzaron con los dos principales sectores responsables de la contaminación de la ciudad: las industrias siderúrgica y química. Al concluir el a?o todos los hornos de más de 20 toneladas y aquellos de menor tama?o ubicados en áreas urbanas habían comenzado a emplear combustibles limpios.
Al mismo tiempo, la ciudad impuso el tercer nivel del Estándar Nacional de Emisiones a los vehículos motorizados. Los automóviles que se adecuan a este nivel, compatibles con el Estándar Euro-3, generan un 50 por ciento menos de emisiones que los incluidos en el segundo nivel.
Gracias a las medidas para favorecer una efectiva reforestación, la cobertura forestal de la municipalidad de Beijing alcanza el 50, 5 por ciento, mientras las áreas verdes se sitúan en un 42,5 por ciento en las zonas urbanas.
El pasado a?o Beijing contó con 234 días con buena calidad del aire, de acuerdo con los niveles establecidos por la normativa nacional, cifra que supera en 5 días la registrada en 2004.
De igual modo, las mejoras ambientales pueden ser percibidas en el incremento del tratamiento de residuos, el cual se ha visto elevado de un 2 al 70 por ciento en las áreas urbanas entre 1990 y 2005. En las regiones rurales de la municipalidad el tratamiento de residuos se incrementó del 30 al 40 por ciento sólo entre 2004 y 2005.
La capital china ha de construir 12 nuevos conjuntos de instalaciones deportivas para la celebración de los JJOO. Para cumplir con los objetivos ambientales y minimizar el impacto del evento en el medio ambiente, el Comité Organizador ha establecido una serie de guías maestras para el dise?o y la construcción de los nuevos recintos.
"Los estándares ecológicos establecidos por el comité son en general más estrictos que los existentes en el país", subraya Yu Xiaoxuan, director ejecutivo del Departamento de Planificación y Medio Ambiente del BOCOG.
Muchas nuevas construcciones o remodelaciones vinculadas a los JJOO han adoptado tecnologías respetuosas con el medio ambiente y han establecido como prioridad el adecuado uso de los recursos.
En total, 100.000 metros cuadrados de láminas de ETFE (etileno- tetrafluoroetileno) serán utilizadas en las paredes exteriores y la cubierta del Centro Acuático Nacional, conocido como "el cubo de agua". Con el uso de este material se espera lograr ahorrar la mitad de la energía que sería necesaria para iluminar el recinto durante el día.
En el Estadio Cubierto Wukesong, la instalación de un sistema de aire acondicionado central permitirá reducir el consumo energético adaptándolo a las necesidades reales. La cancha de béisbol utilizará energía solar para abastecer el sistema de aire acondicionado y para cubrir parte de las necesidades de iluminación. En las mismas instalaciones, un sistema de fibra óptica transmitirá la luz natural al aparcamiento subterráneo.
Bajo el Estadio Cubierto Nacional reposan 8.000 toneladas de escorias de acero aportados por el grupo siderúrgico La Capital. El metal contribuye a solventar los problemas de flotación y al mismo tiempo de la reutilización de residuos. En la Villa Olímpica, otras 3.000 toneladas de escorias de acero han sido empleadas en la construcción de carreteras.
Las cubiertas del alcantarillado de la Villa han sido realizadas con un compuesto de cemento y fibra de vidrio para reemplazar el hierro empleado habitualmente y reducir el consumo del apreciado mineral. Para proveer de agua caliente a los trabajadores de la Villa, así como para la iluminación durante el proceso de construcción y de las oficinas se emplea energía solar.
El desarrollo de la red de metro y trenes ligeros se ha acelerado en Beijing, no sólo en un intento por mejorar el tráfico urbano, sino también para reducir la contaminación vinculada al uso de vehículos personales. Por ahora se ha lanzado la construcción de las líneas 4, 5 y 10 de metro, así como dos líneas especiales que se conectarán con el aeropuerto y el parque olímpico, las cuales llegan a sumar un trazado total cercano a 115 kilómetros. En 2008 Beijing contará con 202 kilómetros en operación de su red de metro, a la que se espera desplazar el 10 por ciento del tráfico de la ciudad.
Junto con la aplicación de estrictos estándares de emisión, la capital china espera que el 90 por ciento de su transporte público y el 70 por ciento de los taxis adopten energías limpias a finales de 2007.
Los 4.000 vehículos que serán empleados exclusivamente para el evento deportivo deberán, según el BOCOG, contar con un nivel de emisiones mínimo e incluso nulo, con la ayuda de motores híbridos o tecnologías de células de combustible.
El BOCOG publicó el logotipo de la "Olimpiada Verde" el 24 de septiembre de 2005. Cinco días más tarde su Sistema de Gestión Ambiental obtuvo la certificación ISO.
En 2005, el Equipo de Promoción "Olimpiada Verde, Acción Verde" realizó más de 180 conferencias en 15 distritos de la municipalidad de Beijing. Con una audiencia superior a las 70.000 personas, las actividades paralelas incluyeron concursos de pintura para ni?os y vídeos elaborados por los estudiantes de la ciudad. El éxito de las convocatorias logró impresionar a los responsables del COI y llevaron a Pal Schmitt, presidente de la Comisión de Deporte y Medio Ambiente del COI, a afirmar: "Beijing logrará los objetivos establecidos para la Olimpiada Verde".
El 18 de noviembre de 2005, el BOCOG firmó un memorándum de entendimiento con el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente. Las dos partes acordaron una cooperación efectiva en el intercambio de información y la promoción de la protección ambiental.
Los esfuerzos por la conservación del medio ambiente tratan de lograr el éxito de los JJOO, mediante los que la población china espera poder mostrar al mundo su sabiduría, cultura y desarrollo tecnológico. "La Olimpiada Verde no es el final de la historia, es sólo el principio. Sus efectos serán duraderos y dejarán un valioso legado en materia de protección ambiental no sólo a China sino a todo el mundo", subraya Yu Xiaoxuan, del BOCOG.
Sin embargo, aún queda mucho trabajo por hacer. Antes de 2008 Beijing necesita construir un segundo gasoducto y elevar la extensión de sus áreas verdes urbanas al 48 por ciento. Asimismo, habrá de elevar la tasa de tratamiento de residuos por encima del 90 por ciento y el uso de aguas recicladas al 50 por ciento.
Para el BOCOG las fechas clave se aproximan cada día más. Incluidas en su lista de trabajos futuros se encuentra el peregrinaje de la antorcha olímpica, así como las ceremonias de inauguración y clausura. "Nos aseguraremos de que estos actos no causen ningún da?o al entorno natural y al patrimonio cultural, especialmente a la Gran Muralla", afirma Yu Xiaoxuan.
La construcción de todas las instalaciones será concluida a finales de 2007, tras la que seguirá su decoración. El comité se asegurará igualmente, de acuerdo con Yu, de que los materiales empleados para la decoración sean "verdes".
Al mismo tiempo, el gobierno local ha comenzado a desarrollar un programa destinado a garantizar la seguridad en lo que respecta a calidad de aire. Durante la celebración de los JJOO, Beijing restringirá el uso de vehículos motorizados y detendrá todos los trabajos de construcción. Las áreas que rodean la capital serán invitadas a realizar una acción conjunta para reducir la descarga de contaminantes y mejorar le gestión de los residuos.
"Las mayores dificultades con las que nos encontramos provienen de la falta de experiencia", reconoce Yu, "los éxitos cosechados en el extranjero no pueden ser copiado directamente. Necesitamos aprender en primer lugar para luego poner en marcha nuestra capacidad creativa."
El 28 de octubre de 2005 se inauguró en el parque olímpico una sub-estación de control de la calidad del aire. Cuando se inicien los juegos, en menos de dos a?os, el medio ambiente habrá mejorado realmente, no sólo porque Beijing en agosto es tradicionalmente una ciudad húmeda y libre de fuertes vientos, sino también porque los esfuerzos en materia ambiental mostrarán ampliamente su recompensa en dicho momento.