Pese a ejercer, como se pronosticó en todas las cábalas, un mayor dominio del balón, Espa?a acusó la fuerte presión del juego de Portugal, no consiguió superar el tridente Moutinho-Veloso-Meireles y, más allá del remate por encima del larguero de Arbeloa, a los ocho minutos del comienzo, tras una jugada combinada de Iniesta y Jordi Alba, apenas creó situaciones claras de peligro delante de la puerta defendida por Patricio.
La entrada de Fábregas, Navas, para meter presión por la derecha, y Pedro, quien otra vez demostró estar en gran forma, dio mucho aire al juego de la roja, aunque no lo suficiente como para romper el planteamiento de Paulo Bento. Solo un disparo de Xavi desde más allá del área grande obligó a reaccionar al meta luso.
Las ocasiones más claras de definir todo antes de la prórroga las tuvo Cristiano Ronaldo. La primera, libre de marca, la mandó por encima del larguero; y la segunda, en el minuto final, con una falta muy cerca del área espa?ola que pudo haber mandado todo al traste, pero otra vez erró la estrella del Real Madrid, que al final del partido reconoció su malestar por haber perdido por segunda vez en esta temporada la oportunidad de acceder a una final en tanda de penaltis.