China está intensificando los esfuerzos para controlar el tabaquismo, con 44 ciudades que introdujeron o revisaron medidas el a?o pasado, lo que elevó el número de ciudades con tales regulaciones a 254, informaron las autoridades sanitarias.

A nivel provincial, 24 regiones de China han implementado regulaciones sobre el tabaquismo, y la proporción de la población protegida por regulaciones integrales para espacios libres de humo sigue aumentando, según los expertos de la Comisión Nacional de Salud.

Los datos se dieron a conocer durante una ceremonia celebrada en Beijing el sábado con motivo de la inauguración de un comité dirigido por instituciones médicas dedicadas al control del tabaco y la mejora de la salud. También se llevó a cabo un seminario como parte del evento.

El control del tabaquismo, que incluye medidas para frenarlo y animar a los fumadores a dejar de fumar, es un enfoque viable para facilitar la prevención de enfermedades en toda la población y mejorar la atención médica individual, declaró Wang Lu, experto en salud de la comisión.

China ratificó el Convenio Marco de la Organización Mundial de la Salud para el Control del Tabaco en 2005, que entró en vigor en 2006.

Tras la publicación de un documento en 2016 destinado a construir una China más saludable, el país decidió intensificar el control del tabaco a través de la fijación de precios, los impuestos y la legislación.

También tiene como objetivo promover activamente el desarrollo de entornos libres de humo y fortalecer la supervisión y la aplicación de la ley en lugares públicos.

El documento tiene como objetivo disminuir la tasa nacional de tabaquismo entre las personas mayores de 15 a?os al 20 por ciento para 2030. En 2022 fue del 24,1 por ciento, lo que supone un descenso de 1,7 puntos porcentuales en comparación con 2020.

En los últimos a?os se han realizado esfuerzos legislativos activos por parte de las autoridades locales para controlar el consumo de tabaco.

Beijing, por ejemplo, prohíbe fumar en lugares públicos, lugares de trabajo cerrados y en filas de personas al aire libre. Shenzhen, provincia de Guangdong, prohíbe fumar en lugares de trabajo cerrados, lugares públicos cerrados, vehículos de transporte público y áreas al aire libre en escuelas, parques e instituciones médicas.

Los esfuerzos están dando sus frutos. Por ejemplo, gracias a las estrictas medidas antitabaco en Shanghai, la tasa de fumadores adultos en la ciudad ha disminuido al 19,4 por ciento.

"China promoverá activamente ambientes libres de humo y hará de la comunicación de la salud un punto focal en el tratamiento de enfermedades para ayudar a los pacientes a adoptar estilos de vida saludables", dijo el funcionario de la comisión Wu Xiangtian.

También intensificará la investigación científica sobre la epidemiología y el tratamiento clínico de la dependencia del tabaco.