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La autonomía regional es practicada en el Tíbet en virtud de la Constitución. China tiene una política de autonomía regional de las nacionalidades, es decir que, bajo la dirección unificada del Estado, en las regiones donde las minorías étnicas viven en grupos compactos, se constituyen órganos locales autónomos con el fin de ejercer su derecho de autonomía. Las minorías étnicas son entonces los que deciden la vida de su región y administran los asuntos que les conciernen. En lo referente a la Región Autónoma del Tíbet, como es el caso de todas las regiones autónomas de China, sus órganos encargados de ejercer la autonomía son la asamblea popular y el gobierno popular de la región autónoma. Los responsables principales deben de ser miembros de la etnia tibetana. En marzo de 1955, el Gobierno central instituyó un Comité Preparatorio para la Región Autónoma del Tíbet. En septiembre de 1965, la primera sesión de la Primera Asamblea Popular de la Región Autónoma del Tíbet tuvo lugar en Lhasa. Es así como oficialmente se estableció la Región Autónoma del Tíbet. Gran parte de los participantes tibetanos habían sido siervos o esclavos en el antiguo Tíbet, pero también, y a su lado, participaron personalidades patrióticas de la aristocracia de entonces y de los círculos religiosos. En 1993, en las elecciones
de las asambleas populares de cantones, distritos y municipalidades, y
las de la Región Autónoma, se contó 1,311 millón
de electores, es decir el 98,6% del total de ciudadanos mayores de 18
años. El voto fue por votación secreta y el número
de participantes fue de 1,201 millones, lo que representa el 91,6%. Actualmente,
los diputados originarios de la Región Autónoma, en general
tibetanos, representan el 99,92% del total de diputados de las asambleas
populares de cantón de la región, 92,6%, a nivel distrital
y el 82,44% del total de diputados de la VI Asamblea Popular de la Región
Autónoma del Tíbet.
Los derechos en materia de
autonomía de la Región Autónomo del Tíbet,
acordados por la Constitución China y la Ley sobre la Autonomía
Regional de las Nacionalidades, son los siguientes: Promulgar estatutos
y reglamentos particulares en lo referente al ejercicio de la autonomía,
conforme con las características políticas, económicas
y culturales del Tíbet; administrar y organizar de manera independiente
la construcción económica y la explotación y utilización
de las reservas naturales de la región; administrar y utilizar
de manera independiente los ingresos financieros de la región y
las subvenciones financieras acordadas por el Estado; desarrollar de manera
independiente la educación, la literatura, el arte, la prensa,
la edición, la radiodifusión, el cinema, la televisión,
etc,. Después de 1965, la Asamblea Popular de la Región
Autónoma del Tíbet y su Comité Permanente han definido
más de 150 reglamentos, decretos, resoluciones y decisiones de
carácter local que se adaptan a la situación real del Tíbet
y salvaguardan los intereses del pueblo tibetano. Sus contenidos están
relacionados con la política, economía, cultura, educación,
etc. Por ejemplo, el "Decreto sobre las Discusiones en la Asamblea
Popular de la Región Autónoma del Tíbet", la
"Orden del Establecimiento de la Ley y Reglamentos con Carácter
Local de la Región Autónoma del Tíbet", el "Reglamento
Concerniente a la Protección y Gestión del Patrimonio de
la Región Autónoma del Tíbet", el "Decreto
sobre la Protección de los Bosques de la Región Autónoma
del Tíbet", el "Método de Gestión de las
Empresas Mineras Colectivas y de Explotación Minera Individual
de la Región Autónoma del Tíbet", el "Decreto
de Aplicación de la Ley sobre el Matrimonio de la República
Popular China", etc. La elaboración y la aplicación
de estos decretos y reglamentos de carácter local ofrecen una garantía
jurídica al pueblo tibetano para ejercer sus derechos democráticos
en los diferentes dominios, y promover el desarrollo social, económico
y cultural de la región.
Los gobiernos locales y el Gobierno central dan una gran importancia a la formación de cuadros locales, a fin de que el pueblo tibetano pueda ejercer efectivamente su derecho de administración de los asuntos locales. Actualmente, los cuadros tibetanos y los de otras minorías étnicas representan el 70,3% del total de cuadros de la Región Autónoma del Tíbet. De los cuadros a nivel de la Región Autónoma, de la municipalidad o de la región administrativa y de distrito, los cuadros tibetanos o salidos de otras etnias representan respectivamente el 67,2%, 65,3% y 60,9% del número total. Los responsables acuerdan una gran importancia al estudio y a la utilización de la lengua tibetana. En 1987, la V sesión de la lV Asamblea Popular de la Región Autónoma del Tíbet ha adoptado "algunas estipulaciones sobre el estudio, la utilización y el desarrollo de la lengua tibetana". El gobierno de la Región Autónoma ha precisado los detalles de estas estipulaciones, según las cuales el tibetano y el Han deben de ser utilizadas por los órganos de la Región Autónoma en todas las reuniones importantes y para todo los documentos correspondientes. Cuando el órgano judicial o juzgado procede al examen de un juicio, el interesado tibetano tiene el derecho de defenderse durante el proceso utilizando su lengua materna, este derecho debe ser garantizado. Actualmente, los principales presidentes de los tribunales y los procuradores, a diferentes niveles, son tibetanos.
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