Cuarta: que se atenga al centralismo democrático. éste es una integración entre centralización con base democrática y democracia con guía centralizada. Constituye tanto un principio organizativo fundamental del Partido como la aplicación de la línea de masas en la vida del Partido. En éste hay que fomentar plenamente la democracia interna, respetar la condición de los militantes como sujeto, garantizar sus derechos democráticos y poner en juego la iniciativa y la creatividad de sus organismos en todos los niveles y de los numerosos militantes. Es imperativo aplicar la centralización correcta con miras a asegurar la cohesión, la unidad y la uniformidad de acción de todo el Partido al igual que el rápido y eficiente cumplimiento de las decisiones que éste haya tomado. Es necesario reforzar el sentido organizativo y disciplinario y mantener la igualdad de todos ante la disciplina del Partido. Se debe potenciar la supervisión sobre los órganos directivos y los cuadros dirigentes militantes, sobre todo los principales cuadros dirigentes y perfeccionar constantemente el sistema de supervisión interna del Partido. En su vida política, desarrolla de manera correcta la crítica y la autocrítica, libra luchas ideológicas en las cuestiones de principio, sostiene la verdad y corrige los errores. Se esfuerza por crear una situación política vigorosa y dinámica en la que reinen tanto la centralización como la democracia, tanto la disciplina como la libertad, y tanto la unidad de voluntad como la satisfacción individual.
La dirección del Partido es, principalmente, la que se ejerce en los terrenos político, ideológico y organizativo. El Partido debe adaptarse a las exigencias de la reforma, la apertura y la modernización socialista y mantener una gobernación científica, democrática y legal del país, para potenciar y mejorar su dirección. Ha de desempe?ar su papel como núcleo dirigente en las otras organizaciones del mismo nivel de acuerdo con el principio de dominar la situación con una visión de conjunto y coordinar las diversas partes. Tiene que concentrar sus energías en dirigir la construcción económica, organizar y coordinar las fuerzas de los diferentes sectores y aunar sus voluntades y afanes, para desenvolver el trabajo en torno a la construcción económica y promover un desarrollo integral de la economía y la sociedad. Debe tomar las decisiones de forma democrática y científica, trazar y aplicar una línea y unas directrices y políticas acertadas, llevar a buen término la propia labor de organización y la de divulgación y educación, y hacer valer el papel pionero y ejemplar de todos los militantes. Ha de actuar dentro de los límites establecidos por la Constitución y las demás leyes. Debe garantizar que los órganos legislativos, judiciales y ejecutivos del Estado, las organizaciones económicas y culturales y las agrupaciones populares trabajen de manera activa, voluntaria, independiente, responsable y coordinada. Tiene que fortalecer su dirección sobre la Federación Nacional de Sindicatos, la Liga de la Juventud Comunista, la Federación Nacional de Mujeres y demás organizaciones de masas y poner en pleno juego el papel que les corresponda. Debe adaptarse a la evolución de la situación y al cambio de las circunstancias para perfeccionar su propio régimen dirigente, mejorar su modo de dirección e incrementar su capacidad de gobernación del país. Los comunistas han de mantener una estrecha y cordial cooperación con las masas no pertenecientes al Partido para luchar juntos por la construcción de un socialismo con peculiaridades chinas.