Presentador: El 6 de diciembre, el presidente de Francia, Sarkozy, no hizo caso a la fuerte oposición y la solemne interlocución de China, y se reunió con Dalai Lama. Lo que condujo a la cancelación de la Undécima Cumbre Sino-Europea. Qué influencias va a dejar a las relaciones sino-europeas la acción del líder francés?
Feng: Esto tiene algo que ver con los cambios internos de Europa y el ajuste en su política para China. El ajuste se refleja en dos aspectos. Uno es el cambio de localización a China, o sea, aparte del colaborador, ahora China se toma como competidor también. Muchos problemas que surgieron en base de las políticas europeas a China no son aislados ni ocasionales, ni casos emergentes.
Otro es que el sentido de valor de las políticas hacia China se está volviendo más notable, y por supuesto es el occidental. Antes de ser elegido presidente, Sarkozy dijo que iría a romper la política de Chirac porque éste ponía demasiada atención al interés económico e ignoraba el sentido de valor occidental. En otro caso, el premier alemán, Merkel, una vez estada de pie en su escenario de poder, opinaba que eran demasiado pragmáticas las políticas del gobierno de Schoroeder hacia China. Estos cambios de políticas y el ajuste han durado por mucho, en vez de ocurrir en un inmediato. El porqué de que los dos líderes insistieron a reunirse con Dalai Lama tiene mucho que ver con sus opiniones sobre las políticas hacia China, y éstas están cambiando.
Será Sarkozy quien toma la responsabilidad de la prorrogación de la Cumbre. Entonces, cuáles son las influencias que ha dejado a las relaciones sino-europeas? A mis opiniones, conduce a un cambio en el aire de colaboración entre China y Europa. Está empeorando el ambiente de diálogos debido a la acción de Sarkozy. Ha afectado las relaciones tanto sino-francesas como sino-europeas.